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Cómo liberar la “mochila emocional”: la importancia de trabajar en los traumas del pasado

Las emociones no siempre son un tema de análisis y en muchos casos mientras suceden, continuamos con nuestras tareas cotidianas sin darles mayor importancia. 

Sin embargo, en el momento menos esperado, aparecen y no podemos explicar el motivo de un repentino estado de ánimo.

Algunas personas lloran durante un tratamiento de yoga, masaje o acupuntura y cuando se les pregunta por el motivo del llanto no pueden responder.

A raíz de estos interrogantes, diversas teorías explican que estas situaciones suceden debido a que existen puntos sensibles en nuestro cuerpo que, cuando se activan, provocan una liberación emocional.

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“La activación de ciertas áreas del cuerpo puede desencadenar ciertos recuerdos”, explica Mark Olson, propietario y director del Pacific Center for Awareness & Bodywork.

Las emociones atrapadas nos agobian, afecta nuestro estado de ánimo y nos sacan todas las energías. (Fuente: Archivo/Pixabay)

“Las emociones se generan constantemente, consciente o inconscientemente, en respuesta a la reactivación de recuerdos u objetivos insatisfechos. Tocar un área X es simplemente un estímulo confiable para reconstruir el patrón asociado con ese evento traumático”, detalla Olson.

Para el especialista Bradley Nelson, “las vibraciones emocionales atrapadas hacen que los tejidos circundantes vibren en la misma frecuencia, lo que se conoce como resonancia. Esto puede hacer que se atraiga una emoción, creando una acumulación o un bloqueo”.

¿Cómo quedan atrapadas las emociones?

Según Bradley Nelson esto se puede explicar con un sistema de tres pasos

  • Desarrollamos una vibración emocional.
  • Sentimos la emoción y cualquier pensamiento o sensación física asociada con ella.
  • Aparece la interconexión entre la mente y el cuerpo.

Pasamos de la emoción procesándola. El proceso emocional ocurre en las estructuras límbicas del cerebro.

El proceso emocional ocurre en las estructuras límbicas del cerebro. (Fuente: Archivo/Freepik)

“Cuando se interrumpe el segundo o tercer paso, la energía de la emoción queda atrapada en el cuerpo. Como resultado, puede experimentar tensión muscular, dolor u otras dolencias” explica el especialista.

La terapeuta Kelly Vincent, compara las emociones atrapadas con llevar una mochila grande. “Nos agobia, afecta nuestro estado de ánimo y agota nuestra energía”.

Emociones: ¿Cómo liberarlas de nuestro cuerpo?

Según el sitio Healthline, el primer paso para liberar nuestras emociones es conectar y comprenderlas. Las personas con emociones reprimidas pueden tener problemas para identificar sus sentimientos, por lo que puede resultar valioso hablar con un profesional de la salud mental.

Algunas formas de liberar emociones reprimidas son:

  • Reconociendo tus sentimientos.
  • Trabajando a través del trauma.
  • Probando el trabajo de sombra.
  • Haciendo movimiento intencional.
  • Practicando la quietud.

Se puede hacer utilizando herramientas psicológicas, como las categorías de distorsión cognitiva, o explorando formas de categorizar las emociones y así ayudar a darles sentido.

Trabajar a través de traumas pasados también puede ayudar a liberar emociones. A menudo, hay cosas guardadas en nuestro interior durante mucho tiempo que van generando malestar. Algunos ejemplos de traumas pasados pueden ser :

  • Descuido
  • Pérdida de un ser querido
  • Separación de los padres
  • Acoso
  • Familia disfuncional

Trabajar los traumas pasados puede ayudar a liberar las emociones.(Fuente: Archivo/Pixabay)

Para superar el trauma, Olson explica que es fundamental sentir dolor por el hecho de que es posible que nunca se obtendrá lo que se quería años atrás. Una vez que se haya permitido ese dolor, se podrá reconocer la estrategia adaptativa que se desarrolló como resultado.

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“Es posible que haya desarrollado una estrategia para ser independiente y que esta situación generó sentimientos de aislamiento. Si no se reconoce la estrategia, podrá existir un sentimiento de alienación”. 

Sin embargo, el especialista aclara que esta situación se puede revertir. “Si visualiza que el aislamiento proviene de su estrategia adaptativa, puede identificar la raíz del problema, modificar su estrategia y así satisfacer sus verdaderas necesidades”.

Fuente: El Cronista

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